Neil Davies
Para tratarse de una avenida que ha sido testigo de la creación de riqueza de miles de millones de dólares, Sand Hill Road, en Menlo Park, California, llama la atención por su sencillez. Unos cuantos ciclistas se dirigen hacia las colinas cubiertas de niebla, un Tesla adelanta a un Prius y los edificios no son muy altos a lo largo de este eje del capital de riesgo en Silicon Valley. Una de estas edificaciones alberga las oficinas de Greylock Partners, donde me reuní con el emprendedor Reid Hoffman, uno de los protagonistas de la era de creación de riqueza y quien ahora vaticina una era de destrucción de riqueza. "Si las empresas no han acogido el concepto de que operan en una era conectada", advierte, "probablemente se encaminan a perecer".